“No vamos a entender nunca el desarrollo del niño si partimos de nuestras hipótesis como usuarios de un sistema alfabético”
Emilia Ferreiro.
El aprendizaje de un lenguaje escrito consiste en apropiarse de un sistema determinado de símbolos y signos cuyo dominio marca un momento crucial en el desarrollo cultural del niño (Vygotsky 1931/1995) es por ello que en el Gimnasio Colombiano del Sur consideramos que como todo ser humano está en proceso de evolución o desarrollo a la trascendencia como expresión máxima de la realidad humana en cuanto piensa, decide y ama, se considera la lecto-escritura como un eje transversal en la formación del estudiante; reconocido este proceso como una línea de desarrollo que inicia con la aparición de gestos como escritura en el aire, es decir, los gestos se muestran como una versión primitiva de los signos escritos futuros, son signos visuales que han quedado fijados en el niño; asociados a estos están los primeros garabatos, en los cuales representa los gestos con los que él mismo representa a un objeto.
La adquisición de la lectoescritura también está acompañada en línea con el desarrollo por el juego infantil, en este caso el niño utiliza un objeto para designar otro, es decir le da la función de signo, y esta sustitución se complementa con gestos representativos; esto nos describe el proceso que vive cada niño en su etapa de desarrollo académico las cuales van desde lo más básico a lo complejo.
Este proceso se vive con los estudiantes de grado tercero enfatizando en metodologías como la conciencia fonológica de cada estudiante, la cual predice el éxito en el aprendizaje de la lectura y aunque cada niño sabe muchas cosas acerca de estas antes de iniciar la enseñanza formal para aprender a leer; todo este conocimiento previo constituye los cimientos para aprender a leer y escribir.
Aunque es cierto que adquirir hábitos de lectura y escritura requiere de un conjunto de habilidades como: lateralización espacial, discriminación visual, discriminación auditiva, coordinación visomotora, buena articulación, entre otras es importante no caer en el error cultural de enmarcar habilidades multidimensionales y complejas en un proceso de desarrollo continuo , que no necesariamente está atado a la edad cronológica o al ingreso a la escuela sino al punto cuando las habilidades son plenamente adquiridas.
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Flor Inelia Mancera Muñoz.
Docente de grado 3°